A partir del concepto de experiencia de la marca se busca a través de las formas, volúmenes, texturas, colores, etc. explicitar y potenciar los valores de la empresa para generar sensaciones al cliente que lo vinculen con esta, y vivir una experiencia única.
Swarovski y el cristal cómo joya preciosa cómo referentes, se desarrolla un espacio envolvente, donde se evidencia el elemento piedra irregular, un espacio de lujo, que te absorbe, con cierto toque de fantasioso y de ingravidez. También es un espacio flexible que según las necesidades se puede transformar fácilmente.
El resultado es un espacio expositivo, pensado para que el cliente pueda descubrir toda la gama de productos de la marca, para que se puedan organizar diferentes eventos y recibir un trato personalizado.